Exfoliar para embellecer la piel

Exfoliar para embellecer la piel

Como expertas en el cuidado de la piel, compartimos contigo el secreto mejor guardado de las mujeres que ya han decidido unirse a la onda de la cosmética natural; se trata de la exfoliación, un proceso indispensable para promover la renovación celular.  Los beneficios reales, empiezan a sentirse desde la primera vez, lo importante será elegir ingredientes naturales que sean suaves con la piel y amigables con el planeta.

Atrévete a descubrir una técnica sencilla para embellecer la piel, sin salir de casa.

Una adecuada exfoliación suaviza la textura de la piel seca; limpia los poros y reduce la aparición de acné en piel grasa; estimula la producción de colágeno y reduce la apariencia de manchas o cicatrices en pieles maduras.

Empieza a incluir esta técnica en tus rituales de belleza, una o dos veces por semana, y siente sus beneficios:

✨ Limpia impurezas y exceso de grasa en los poros, haciéndolos menos visibles.

✨ Mejora la absorción de cremas hidratantes y antioxidantes.

✨ Ayuda a reducir finas líneas de expresión.

✨ Elimina toxinas acumuladas en la capa externa de la piel, facilitando su oxigenación.

✨ Contribuye a un mejor y más duradero bronceado; realízala unos días antes de exponerte al sol.

Para una adecuada exfoliación,  hoy te presentamos dos técnicas 100% naturales, una enfocada en el rostro y la otra podrás aplicarla en todo tu cuerpo.

 Cepillado en seco:  En la mañana sobre el rostro limpio y seco, usa el cepillo con fibras de bambú de Organik by  Aguadulce.  Realiza un suave masaje con movimientos circulares: empieza por la zona del escote y, con movimientos ascendentes, continúa por el cuello, mentón y mejillas hasta llegar a la frente; evita la zona del contorno de ojos. 

Además de exfoliar tu piel y prepararla para absorber mejor los ingredientes de cremas y serums, el cepillado en seco estimula la circulación linfática y sanguínea.   Por experiencia, sabemos que cepillar el rostro, favorece una piel más firme y luminosa, pero tener en cuenta que es importante usar un cepillo diseñado especialmente para este fin y realizar el proceso máximo dos veces por semanas para evitar irritaciones.

Incluye también el cepillo de rostro a la hora de tu limpieza facial y obtendrás un doble efecto: limpiar y exfoliar; aplica un poco cantidad del jabón de rostro sobre el cepillo húmedo y espárcelo por tu cara con un masaje similar al que te recomendamos antes.  Enjuaga con abundante agua y siente que además de remover residuos y maquillaje, tu piel estará suave, luminosa y más receptiva a los productos que uses para hidratar, humectar o nutrir.

 Exfoliación natural: prepara una mezcla que le dará luminosidad y un delicioso aroma a tu piel:  usa 2 cucharadas de aceite de semilla de uva y una cucharada de panela orgánica en polvo, de manera opcional podrás aplicar una o dos gotas de aceite esencial de lavanda. Durante la ducha, evitando el uso de jabón, aplica esta mascarilla con movimientos circulares y ascendentes desde los pies,  pasa por pantorrillas, rodillas, muslos, abdomen, glúteos, espalda, brazos, codos y cuello.  Enjuaga muy bien y siente, de inmediato, lo sedosa y hermosa que estará la piel de tu cuerpo.  Lista para el aceite o crema corporal. La exfoliación regular, máximo 2 veces por semana, es una técnica beneficiosa para muchas mujeres; sin embargo, es importante que antes de empezar conozcas bien tu tipo de piel para evitar excesos y posibles irritaciones, principalmente en pieles muy sensibles o con afecciones específicas como psoriasis o rosácea; casos en los que te recomendamos consultar a tu especialista.